educar sin gritos

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Tengo tres hijos totalmente diferentes, no se parecen en nada en cuanto a carácter, pero los dos mayores han sido niños “fáciles de criar”, me han dado muy pocos problemas en cuanto a educación, suelen hacer caso sin que tenga que levantar la voz, no son nada celosos de lo que tienen los demás, comparten habitación, juegos, riñas… se llevan estupendamente, la verdad es que he tenido que educar sin gritar desde el primer momento.

Con Valeria es harina de otro costal, es una niña de carácter fuerte, que quiere tener razón siempre, desde bien pequeñita se frustra cuando las cosas no salen como ella quiere, hemos tenido que superar rabietas, si se enfada se va gritando y llorando a su habitación de jugar; incluso hay niños que lanzan los juguetes o pegan golpes que pueden llegar a hacerles daño.


Un día me paré en seco y me di cuenta que nos pasábamos el día gritando. Cuanto más desobedecía, más gritábamos nosotros. Al final la casa se convirtió en un campo de batalla a ver quién gritaba más, y en realidad ella no escuchaba, sólo gritaba también, se enfadaba, se frustraba más; no obteníamos ningún resultado positivo en nuestro caso, así que tomamos una determinación: se acabaron los gritos.

educar sin gritar a los niños

Y me preguntaréis: ¿Qué podemos hacer en lugar de gritar para educar a nuestros hijos? ¿Funciona realmente?

Cada vez que les gritamos, ellos se frustran más y los animamos a actuar de manera similar, a hacer justo lo que queremos evitar. Los estamos provocando para que actúen, respondan y nos transmitan el mismo comportamiento, tanto a nosotros como a los demás. Todos cometemos estos errores, pero os aseguro que no ayuda en nada, solo alimentamos el fuego.

CÓMO EDUCAR SIN GRITAR

 

ATIÉNDELO

 

Llévate al niño del lugar donde ha empezado a llorar o gritar y préstale atención. ¿Por qué? Su mal comportamiento es el resultado de no obtener lo que quería, de buscar atención, de su necesidad de ser escuchado. Muchas veces, cuando los niños tienen problemas para comunicarse, comienzan a expresar su enfado y frustración gritando. Al prestarle atención a un niño, les mostramos que son importantes y que comprendemos cómo se sienten.

 

CÁLMALO

 

educar sin gritos

Respirad profundamente juntos (lo necesitarás también). En lugar de enfadarte, dale un abrazo e incluso si estáis en casa, coge un cuento y léeselo. Una vez que el niño esté tranquilo, será más fácil que nos escuche en lugar de bloquearlo cuando esté pleno ataque de ira.

 

COMPRÉNDELO

 

Una vez que el niño se haya calmado, debemos intentar reconocer qué les ha provocado el enfado: “Tenías muchas ganas de jugar con eso, ¿verdad?!”. Debemos mostrar empatía hacia sus sentimientos, hacerles ver que son importantes, que los escuchamos. Lo más probable es que nos acaben diciendo: “Mamá, estoy muy cansada” o “Tengo hambre”.

 

HÁBLALE CON CALMA PERO CON FIRMEZA

 

“Entiendo que estés cansada, pero deberías decírmelo en vez de ponerte a lanzar juguetes”. Agáchate y ponte a su nivel para hablarle, debemos tener contacto visual con el niño y hablarle de manera suave pero firme. Es mucho más probable que nos escuche si les hablamos con una voz calmada. Debemos mostrar que hablamos en serio para que sepan que lo que hicieron NO está bien.

 

EXPLÍCALE LAS CONSECUENCIAS

 

cómo educar sin gritos

“Vamos a guardar estos juguetes hasta mañana”. Si los cogen de nuevo, los colocamos en un lugar alto donde no puedan llegar. Entenderán que la próxima vez que los lancen, volverá a pasar lo mismo y no podrán jugar con ellos.

 

REPITE Y NO CEDAS

 

Si vuelve a lanzar los juguetes de nuevo otro día, es importante seguir como la vez anterior, continuamos guardando los juguetes hasta el día siguiente. Es importante establecer una reglas y repetirlas sin ceder.

 

EXPLÍCALE CÓMO HACERLO

 

En vez de decir: “¡Deja de hacer eso!”, debemos explicarles claramente por qué no pueden hacer algo. “Tienes que jugar bien con tus juguetes o podrían romperse”. Es más probable que se paren a pensar en lo que les decimos y hagan caso.

 

INDÍCALE LO QUE QUIERES QUE HAGA

 

Una vez que les hemos explicado por qué no pueden hacer algo, debemos decirles lo que sí pueden hacer: “Puedes jugar en tu habitación” en vez de decirles “No saques todos los juguetes al salón”.

 

ELOGIA EL COMPORTAMIENTO POSITIVO

 

Cuando nuestro hijo escucha y obedece, debemos decírselo de inmediato para que vea que estamos atentos a lo que hace: “¡Qué bien has jugado hoy!”. Ellos adoran que les digamos qué bien hacen las cosas y vernos felices gracias a ellos.

 

Hay días que quiero tirarme de los pelos cuando tiene uno de sus berrinches y yo llego cansada del trabajo o porque he tenido algún problema y me tiene preocupada… como todo el mundo, tenemos problemas de adultos que a veces trasladamos a los niños sin que tengan culpa de nada. No es fácil seguir todas estas pautas, ya os digo que yo sigo fallando de vez en cuando, pero intento hacerlo mejor cada día, disfrutar más de mi maternidad, y la verdad es que estamos teniendo más “mejores días” entre las dos.

¿Qué técnicas usáis para educar a vuestros hijos? ¿Cómo conseguís calmar vuestros nervios para educar sin gritar?

FOTOS: https://www.shutterstock.com


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5 COMENTARIOS

  1. buff lo intenare x k últimamente me veo un ogro todo el dia gritando ( pero es k no le hacen ni caso) Mis mellizas tienen 2 años y estan k x todo ay problemas .. Ya te contare k tal jajjajja

    • Yo muchas veces estoy igual, tengo que irme a otro sitio y respirar para no acabar pegando gritos como una histérica, y es que hay días que…

      Suerte!!!

  2. Cuando mi hijo mayor era pequeño, tenía mucha paciencia con él. Conforme pasaba el tiempo, su dificultad para cumplir normas empezó a desquiciarme. Me paso el día gritando como una loca y lo peor de todo es lo mal que me siento después. La mayoría de las noches, lloro cuando están acostados, por la frustración que me genera no ser capaz de controlarme. El pequeñito tiene 22 meses y es un torbellino, de los que te tiran el juguete o lo que tengan a mano, cuando se le cruza el cable. Y todo se está repitiendo. Ya estoy empezando a gritarle también. Intento hacerle entender con cariño y suavidad, pero se ríe y continúa igual(el caso es que el jodío entiende lo que le dices, a pesar de su edad) Es horrible la sensación que nace en mi, así que voy a aplicar todo las pautas que nos das. Mil gracias!!!

    • Gracias a ti por darme tu opinión. Yo muchas veces no lo consigo porque como mi hija tenga un día de los muy malos… dan ganas de cualquier cosa. Yo procuro ir a calmarme a algún sitio, incluso salgo al rellano de la escalera a respirar y coger aire JA JA JA.

      Al final crecerán y todo esto pasará, pero sí, mientras pasa, es durillo.

      Un besazo

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