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Tengo un montón de libros y cuentos de los que hablaros pero no encuentro el tiempo suficiente para sacar los post con las reseñas.
He pensado que lo mejor para que os llegue la información a tiempo de todos los libros, es que os los vaya enseñando de forma rápido en los Stories de IG y haciendo una pequeña descripción en la galería de fotos, así que os aconsejo que me sigáis en mi cuenta de Instagram para estar al día, e iré subiendo los post al blog con un poco más de tranquilidad.
A lo que iba, hoy quería hablaros de Mamá Bruce de Ryan T. Higgins, un cuento que en casa nos ha encantado y con un mensaje de fondo súper bonito.
Mamá Bruce de Ryan T. Higgins
Bruce es un oso muy gruñón al que no le gusta comer huevos crudos, a él le gusta cocinarlos con recetas elegantes que busca en Internet. Un día, Bruce encuentra una receta para los huevos de ganso hervidos a mano rociados con salsa de miel y salmón.
Mmmmmmm ……
Bruce saca su carrito de compras y se pone a trabajar. Visita el río y coge un poco de salmón; roba en la colmena la miel y le arrebata algunos huevos a un ganso. Regresa a su guarida donde comienza los preparativos para hacer esta deliciosa receta. Pone los huevos en la estufa, y cuando regresa, para su sorpresa, cuatro polluelos salen de los huevos.
Por supuesto, estos cuatro pequeños inmediatamente identifican a Bruce como su Mamá.
Siendo el viejo oso gruñón que es, Bruce arroja los pajaritos en su carrito de compras y regresa al nido de la mamá ganso, pero para su sorpresa, mamá ganso ya ha emigrado hacia el sur para el invierno.
Oso intenta dejar atrás a los pollitos, pero a ellos les ha gustado y lo siguen a todas partes.
Risas aseguradas con Mamá Bruce
En este cuento de Ryan Higgins (publicado por Editorial Anaya) entre risas en voz alta, los lectores más peques se reirán a carcajadas y se deleitarán mientras observan la aventura de estos pequeños que reclaman al malhumorado Bruce como su propia mamá y el trabajo del oso, criándolos y finalmente intentando enviarlos en su camino al sur.
Bruce finalmente se da cuenta de que los gansos no van a ir a ninguna parte sin él, así que si no puedes vencerlos, únete a ellos.
Las ilustraciones, el uso del color y la línea de Ryan hacen de este un cuento que los lectores disfrutarán mucho. Esta historia es puro placer y alegría para cualquiera que abra sus páginas.
Las expresiones faciales que Ryan es capaz de transmitir con sus ilustraciones son simplemente perfectas para Bruce y los gansos, ya que aprenden a convivir y convertirse en una familia.
El pequeño giro sorpresa al final (¡que no os voy a arruinar!) Es el final perfecto para un libro encantador, y mantendrá a los peques riéndose incluso después de que hayan terminado el cuento.
Un cuento para niños a partir de 3 años que realmente os aconsejo para que leáis con vuestros fieras y que merece tener entre los cuentos que los peques pueden releer una y otra vez.
Podéis comprarlo en la web de Editorial Anaya, en grandes almacenes, librerías y en Amazon.