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¡Qué complicado es contar algo de alguien a quien de verdad conoces! no porque no sepa qué decir (como para cerrarme a mí la boca) sino porque es imposible decir todo lo que me gustaría y no soltar un tochazo que haga que os sangren los ojos, os aseguro que es muy difícil.
Y vosotros estaréis pensando… ¿pero qué dice esta tía hoy? pues es que mi amiga Sara-Sara Palacios-Walewska ha escrito un libro, y yo con todo mi cariño, después de leerlo he querido hacer un post para contároslo y… ¡no sé por donde empezar! en serio, me quedo sin palabras. Es un placer ver cómo una de tus amigas triunfa y es feliz con lo que hace, y os aseguro que Sara DISFRUTA de su trabajo lo cual se ha visto totalmente reflejado en su libro, Relaxing Mum of Café con Leche.
Conste que he sido la última amiga a la que le ha llegado el libro (ejem… Sarita te lo voy a perdonar porque te quiero y porque cuando me llegó estábamos de súper evento molón en Disneyland París), pero estoy segura de que también he sido la que más rápido se lo ha leído, volvimos del evento y yo tenía guardia al día siguiente, así que me lo llevé con la intención de leer un ratito en los momentos de tranquilidad (¿he dicho tranquilidad?) que solemos tener de vez en cuando en el hospital; pues bien, tuve una guardia de las de ponerle medallas, entré por la puerta grande con una parada cardiaca en marcha, una vuelta de quirófano con desmayo y vomitera incluida, y una señora con demencia a la que le dio por discutir con su marido (fallecido como 200 años antes) a voz en grito… casi me pongo a llorar allí mismo, pero si suelto la primera lágrima ya no hay quien me pare así que ¡manos a la obra Lourditas que en peores te las has visto!
Para no faltar a la verdad tengo que decir que en menos de una hora tenía todo resuelto y las aguas volvieron a su cauce en amor y compañía, así que en cuanto la parada se normalizó se la llevaron a la UCI, la vuelta del quirófano dejó de echar por la boca todos los males del universo y convencí a la señora de que su marido (muerto) tenía que esperar en la sala de espera; me senté en mi silla, puse los pies en alto y cogí mi Relaxing Mum of Café con Leche para echarme unas risas.
Sabía que iba a reírme, conozco a Sara el tiempo suficiente como para no dudarlo, normalmente lo pasamos en grande cuando nos vemos, pero el viaje a Disney fue el colofón total de las risas, porque os aseguro que no he disfrutado un viaje como este EN TODA LA VIDA. Lo que no sabía es que acabaría con un moratón en el culo (así, sin miramientos) por caerme de la silla leyendo Relaxing Mum of Café con Leche… os pongo en situación:
Pies en alto (foto que puse en mi Instagram justo después del hostión padre que me metí), libro en mano, galleta (que también me mandó Sarita la fantástica porque sabe que estoy a dieta y necesitada de azúcares, además las hizo de chocolate con alevosía para asegurarse de que no pudiera evitar comérmela ¡yo también te quiero Sara!); empiezo por la introducción (conste que suelo saltarme esto en todos los libros), comienzo con el meollo y conforme leo voy sonriendo porque ¡¡joder, que no os lo he dicho!! el libro va sobre maternidad… o no, bueno sí… bueno no… a ver Sí, va sobre ¡cómo hemos sobrevivido a la maternidad! lo siento sí, digo sobrevivir porque perdonarme pero tengo 3 maravillosos y preciosos hijos que me dan la vida, pero también me la quitan, que será esto políticamente incorrecto pero en serio que hay días que me tiraría por el balcón, porque a ellos no los voy a tirar, pero yo me pegaría de cabezazos contra la pared para perder la consciencia de vez en cuando y así poder dormir un rato.
Sigo que me pierdo… os decía que iba leyendo sus desventuras maternales en tono de guasa (porque Sara es así siempre, una broma andante, siempre tiene un chiste), yo me iba riendo con sus puntazos porque muchos de ellos veréis que os han pasado a vosotras, es como leerte a ti misma (pero con más gracia), me iba relajando, mis pacientes tranquilos, me encuentro paz, me voy echando hacia atrás en la silla (de esas de escritorio con 3 ruedas) y leo:
[…]A favor de los centros comerciales: que los establecimientos no tienen puertas. Cuando vas con carro descubres el inventazo que son las puertas automáticas que se abren como las aguas al paso de Moisés. Pero esas otras que hay que empujar, y si tienen dos hojas ya ni os cuento, son el infierno. Cuando hay que hacerlo hacia dentro tienes la tentación de abrirlas como en los hospitales, con el chasis de tu carro (y gritando ¡hay una emergencia, hay una emergencia!), pero no cuela. Si hay que abrirlas hacia afuera la de movimientos raros que hay que hacer para lograrlo. Por mucho menos te daban premios en el Candy Crush.[…]
Me recordó un episodio cuando sólo tenía a mi hijo Dani, el mayor, e iba yo toda preciada con mi carro y mi niño recién estrenado y me quedé clavada entre las puertas de un comercio, que ni pa dentro ni pa fuera, con una cara de agobio que os podéis imaginar, y tuvo que venir el guardia de seguridad a sacarme (¡qué vergüenza y susto pasé!); me dio la risa leyéndolo, me hice para atrás en la silla y… ¡hostión terrible! me metí una leche con voltereta para atrás incluida que casi me rompo la crisma, mi pobre compañera auxiliar se llevó un susto de muerte y yo no podía parar de reírme, 5 minutos por lo menos estuve en el suelo con un ataque de risa.
Cuando conseguí ser persona (enfermera) de nuevo y recuperar mi dignidad, seguí con el libro y me lo leí de una sentada, me lo pasé pipa leyéndolo (esta vez sentada como una señora como diría mi abuela), os aseguro que es un GRAN libro, vais a leer la maternidad desde otra perspectiva pero sin obviar nada y con él os daréis cuenta de que las cosas que nos pasan no son sólo nuestras, sino que las compartimos con la mayoría de madres, y que para bien o para mal, lo que hacemos, lo hacemos SIEMPRE con AMOR.
Me encantaría que leyerais el libro, estoy segura de que no va a dejaros indiferente, vais a disfrutar mucho de la fluidez de sus palabras, de los guiños a la maternidad, de los momentos importantes de la vida contados con mucho humor y de la vida misma, sin filtros.
Un placer Sara tenerte entre los míos, sabes que te quiero muchísimo y que formas parte de las personas importantes de mi vida, que no son muchas pero son las mejores, sin duda #muyfandelawalewska.
Y hasta aquí puedo leer, que me pongo moñas y pierdo la gracia. Compraros Relaxing Mum of café con leche que lo tenéis disponible en Amazon aquí, en FNAC, en El Corte Inglés (en breve) y en las mejores librerías (las que no lo tienen es porque no valen ná).
Sara es la autora del blog de maternidad Mamis y bebés, es una de las chicas de Mujeres y Madres Magazine, y junto a Pilar de Maternidad Continuum y una servidora da consejos sobre blogging en Trucos para mi blog.
Relaxing Mum of Café con Leche
Ficha Técnica:
Título: Relaxing Mum (of café con leche)
Autora: Sara Palacios “Walewska”
Editorial: Base Editorial
Número de páginas: 238 páginas
Fecha de lanzamiento: 3 de abril de 2017
[…] contaros yo lo fantástico que es sino que prefiero dejaros las reseñas de Priscila Martínez, de Lourdes Picó y María José Cayuela para que sean otras las que os digan qué es lo que les gusta de mi […]